Cuando la empresa detecta que su logotipo o su imagen corporativa se ha quedado anticuada, toma conciencia de que necesita una nueva imagen, acorde con los cambios del entorno y de la propia empresa. Pero ¿qué hacer cuando un logo se queda anticuado? Las empresas, marcas e imágenes son vivas, están en movimiento, en continua evolución en su entorno. La vida es movimiento y la comunicación, también. Lo mismo ocurre con los logotipos y la imagen corporativa de las empresas; son actores en una sociedad en continuo cambio. Es por ello por lo que las empresas deben detectar en un momento determinado de su evolución la necesidad de aportar un cambio a la imagen que le identifica: su logotipo. A cada una le llega en un hito de su desarrollo, muy distinto de unas empresas a otras. El logotipo es el símbolo de la empresa que se mantiene en el imaginario colectivo, en la mente de su entorno y de sus clientes. Identifica a la empresa, marca, institución o sociedad y las cosas que tienen relación con ellas. Restyling, rediseño o modernización de tu logotipo. El tiempo pasa también para los logos y las marcas. Llega un momento en el que su estética se queda obsoleta; las técnicas, códigos y patrones visuales y las tendencias han evolucionado. Cuando esto se hace evidente, se llega a la conclusión de que es el momento de cambiar. En el proceso del restyling o rediseño, el logotipo debe conservar las bases que hacen reconocible al símbolo entre sus públicos, debe mantener el “espíritu” de la empresa y preservar los valores que diferencian al producto o servicio que representa. Debe respetar también ciertas características y atributos de la idea y concepción original del logo. Se trata únicamente de renovar y actualizar su estética. El Restyling o modernización del logo y es una renovación visual del logotipo. Los profesionales y diseñadores optimizamos la imagen y el estilo del logo, preparándolo para todas las oportunidades que se presentan para la empresa. Después de la modernización, el logotipo sigue siendo perfectamente reconocible por su público, pero ya no se ve anticuado ni obsoleto. En ocasiones incluso, la transición puede llevarse a cabo de forma progresiva en la empresa a nivel interno. Se irá introduciendo de forma progresiva en el material corporativo, conviviendo durante un tiempo la versión antigua del logo y la nueva. El restyling del logotipo suele ser definitivo en las empresas. No obstante, hay otra modalidad en empresas grandes, que consiste en dar un nuevo «look» al logo para eventos, ocasiones o fechas particulares. A continuación exponemos una muestra de logotipos de empresas muy reconocibles que han ido evolucionando y adaptándose a los tiempos: